El sector de la estiba sigue pendiente de lo que puedan dar de sí las conversaciones que empresarios y sindicatos vienen manteniendo para intentar avanzar de cara a poder concretar el convenio colectivo del puerto de Algeciras, el cual servirá como base para la redacción del V Acuerdo Marco del sector a nivel nacional.
La falta de concreción por parte del Ministerio de Fomento, que sigue sin dar a conocer el Reglamento de descuelgue del Real Decreto Ley aprobado en junio, y las diferencias que aún existen entre las partes, en dos asuntos fundamentales en la negociación como son la reducción de manos y de salarios, han impedido cumplir el objetivo de cerrar el convenio colectivo del sector de la estiba del puerto de Algeciras, antes de que expirase el actual.
No obstante, las partes no parecen tener prisa, ya que, a fecha 31 de diciembre, no se aplicará la ultractividad y, por tanto, las condiciones laborales de los trabajadores seguirán siendo las actuales, sin que vuelva a entrar en vigor el último texto aprobado en 2012. Una situación que otorga más tranquilidad a la negociación, porque evita así la reacción de los sindicatos, ante lo que podría haber sido una pérdida de derechos laborales y sociales.
Mientras, la negociación continúa. Esta semana, los responsables de APMT y TTIA se han reunido en el Hotel Guadacorte de Los Barrios, para seguir avanzando hacia posibles acuerdos, pero las distancias siguen muy marcadas en referencia a los 174 «apuntadores» que las empresas pretenden amortizar, a la vez que los sindicatos insisten en su mantenimiento, para lo cual se optaría por una reorganización de las manos.
En relación a los salarios, sigue la diferencia de criterios, ya que los sindicatos no aceptan incrementar una bajada de los sueldos por encima del 6,5 %, mientras las empresas reclaman el cumplimiento del 10 % del que se habló en su momento, tras el acuerdo del 29 de mayo que pouso fin a la huelga.
Son estrategias de una negociación que avanza lentamente y que, en principio, no va a llegar a tiempo a la meta, dado que ya es materialmente imposible que a fecha 31 de diciembre se pueda cerrar el documento final. Se plantea, por tanto, un año 2018 en el que la estiba cobrará de nuevo protagonismo, mientras sobre el sector planea el expediente sancionador abierto por la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia a los sindicatos y la patronal de la estiba portuaria por considerar que el acuerdo con el que pusieron fin a seis meses de conflicto en el sector pudiera no ser legal.