Una operación llevada a cabo por funcionarios de la Agencia Tributaria y agentes de la Guardia Civil ha permitido la aprehensión de 65 kilogramos de cocaína, que llegaron al puerto de Algeciras en el interior de un contenedor cargado de chatarra. En el operativo, ha sido detenida una persona, natural de Málaga.
El servicio se inició tras las sospechas de los funcionarios aduaneros, encargados del despacho de la mercancía, que decidieron pasar el contenedor en el que viajaba la droga, por el escáner con el que cuentan las instalaciones portuarias de esta ciudad. Fue entonces cuando se observó la existencia de una serie de objetos que no se correspondían con la mercancía declarada, por lo que se decidió la apertura del cajón, en el que se hallaron ocho cilindros metálicos de reducido tamaño, que tuvieron que ser cortados para acceder en su interior, ya que se encontraban recubiertos de placas de plomo. En su interior se hallaron pastillas conteniendo una sustancia de color blanco y presentación arenosa, que dio positivo al narcotest por cocaína.
Tras descubrir la droga, la Guardia Civil llevó a cabo una entrega vigilada del envío comercial, siguiendo en ruta al contenedor hasta el destino comunicado por la empresa destinataria, una nave comercial en un polígono industrial a las afueras de Málaga. Allí se encontraron unas instalaciones no aptas para la operativa comercial habitual e indicios de, al menos, de un envío anterior. Los agentes procedieron entonces a la detención de la persona encargada de recibir el contenedor, un varón mayor de edad.
Las actuaciones continúan y la Guardia Civil no descarta llevar a cabo nuevas detenciones.