Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía, Vigilancia Aduanera y agentes de la Guardia Civil, han llevado a cabo una operación internacional en la que han abordado en altamar una embarcación que transportaba 3.800 kilogramos de cocaína desde Colombia a nuestro país.
La droga se encontraba oculta en un compartimento estanco en el interior de la estructura del barco. La nave fue interceptada en aguas del Atlántico, a unas 540 millas de las Islas canarias y se ha detenido a los siete tripulantes del buque.
La operación se inició gracias a distintas investigaciones relacionadas con el tráfico de estupefacientes, lo que permitió tener conocimiento de que una organización criminal trasladaba un importante alijo de cocaína desde Colombia a España y para ello, utilizaban un remolcador.
Tras realizar las pesquisas oportunas, los agentes, con la colaboración de varias agencias internacionales y coordinados por el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), localizaron el remolcador a mediados de septiembre a unas 360 millas náuticas de Guyana, lo cual les permitió calcular que, por su ruta y velocidad, llegaría a costas españolas a mediados de octubre. Una vez que los policías solicitaron la colaboración del Servicio de Vigilancia Aduanera y obtuvieron la correspondiente autorización judicial, agentes del Grupo Especial de Operaciones (GEO) del Cuerpo Nacional de Policía procedieron al abordaje de la nave a unas 540 millas náuticas de las islas Canarias.
A su llegada al Puerto de Cádiz la embarcación ha sido sometida a una minuciosa inspección que ha permitido localizar un compartimento estanco en el interior de la estructura del barco. En dicho habitáculo, situado bajo la cocina, ocultaban 3.800 kilogramos de cocaína. Los agentes han contado para culminar la operación con la colaboración de la DIRAN de Colombia.