El Aula del Mar y el Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas (CREMA) están de enhorabuena tras confirmarse la renovación del acuerdo de colaboración con el Ayuntamiento de Málaga, que destinará 40.000 euros, en una iniciativa que se engloba dentro de las actuaciones de apoyo que mantiene a las organizaciones que trabajan en el campo de la concienciación medioambiental en la ciudad.
El concejal de Sostenibilidad Medioambiental, Raúl Jiménez, y el responsable del Aula del Mar, Juan Antonio López Jaime, han firmado el convenio que regula esta relación, que garantiza la continuidad de las actividades formativas y ambientales que desarrolla habitualmente la entidad.
Entre las actuaciones que se desarrollarán gracias al acuerdo del Ayuntamiento con el CREMA destacan las que persiguen un objetivo educativo, como es el caso de las visitas de los escolares al Museo Alborania dentro del programa educativo municipal Pasaporte Verde.
Asimismo se diseñará y producirá material de divulgación, destinado a la concienciación pública en general relacionada con la conservación de las especies marinas y litorales, el cambio climático o las especies invasoras. También se mantendrá en el Museo Alborania el centro de información de espacios o especies litorales y equipamientos malagueños de interés y se celebrará el segundo concurso fotográfico litoral malagueño, además del día de puertas abiertas dedicado a las especies marinas y litorales amenazadas en Málaga.
El CREMA trabaja desde el 1994 en el puerto de Málaga, en donde realiza funciones como centro de interpretación y conservación de especies marinas amenazadas. En esta línea, el centro colabora con las autoridades competentes en la conservación del medio marino y, en especial, de los mamíferos y las tortugas. La cofinanciación del Ayuntamiento de Málaga y la Diputación Provincial presta especial atención a las acciones de sensibilización, educación ambiental y participación ciudadana.
Por otro lado, el Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas mantiene un contacto directo con las cofradías de pescadores malagueñas y el sector pesquero para desarrollar actividades de sensibilización diseñadas especialmente para ellos y sus familiares. Asimismo, sus responsables han mantenido y reforzado las relaciones con agentes costeros que participan en la detección, aviso, primeros auxilios y recogida de datos en caso de varamiento de estos animales.