Son muchos los retos personales que llevan a osados nadadores a echarse al mar para cubrir los 15 kilómetrosmetros que separan Tarifa de la parte más cercana de Marruecos. Pero llama la atención que se haga en grupo, de cuatro personas, y por otra gente.
Lo han logrado este martes Manuel Jesús Díaz García (43 años), Rodrigo García Delgado (42), Ángel luis Saborido Palomo (44) y Rafael Alcázar Otero (49), que salían de la isla tarifeña a las 09:05 horas, con viento de poniente.
Todos ellos han llevado a cabo un entrenamiento preparatorio muy exigente, sin tregua en la alimentación, como si de deportistas de élite se tratase y todo por ella, por Marina, una chica de 18 años afectada por fibrosis quística, una enfermedad considerada poco frecuente, crónica, hereditaria y degenerativa que afecta principalmente a órganos como los pulmones y al sistema digestivo y que representa un grave problema de salud.
Esta patología no tiene cura y, una vez agotados los tratamientos paliativos, no queda otra que someterse a un trasplante pulmonar. Marina pasaba 24 horas conectada a una máquina de oxígeno para poder vivir y esperaba un trasplante de sus pulmones. Los nadadores españoles comprendieron entonces que esta chica sería su ejemplo y se comprometieron con este reto a ayudar a los afectados por la enfermedad.
En el Hospital Reina Sofía de Córdoba se encuentra una de las más acreditadas unidades de trasplante pulmonar y la Asociación Andaluza de la Fibrosis Quística mantiene un proyecto de solidaridad con estas familias y personas afectadas. A ellos se quieren unir los protagonistas de este martes en el Estrecho de Gibraltar, dando visibilidad y apoyo, y usándolos de ejemplos en su desafío.
El reto se ha conseguido en tres horas y 50 minutos para recorrer 15,6 kilómetros hasta Punta Cires (Costa Marroquí), llegando a las 12:55 horas. Lo de menos es el tiempo, lo más destacado, el gesto solidario que, esperan, sigan muchos por el bien de Marina y todos los que se encuentran afectados por esta dolencia como ella.