Sinar Mas Cepsa ha inaugurado su primera planta oleoquímica en Indonesia, que ha supuesto una inversión de 300 millones de euros en los últimos dos años. La planta producirá alcoholes grasos a partir de aceite de palma sostenible, un ingrediente clave en la fabricación de productos cotidianos como los de limpieza doméstica o cuidado personal.
Sinar Mas Cepsa es una empresa conjunta (joint venture – JV) entre Cepsa, compañía energética integrada, líder mundial en la producción de alquilbenceno lineal (LAB), materia prima utilizada para la fabricación de detergentes biodegradables; y Golden Agri-Resources (GAR), filial del consorcio indonesio Sinar Mas y la segunda compañía mundial de producción integrada verticalmente de aceite de palma.
La planta de Dumai tiene una capacidad de producción anual de 160.000 toneladas métricas de alcohol graso al año. Las ventas de los alcoholes de origen vegetal, cada vez más demandados como materia prima para productos de cuidado personal y detergentes líquidos, en mayor medida que los derivados convencionales del petróleo, se centrarán principalmente en el mercado asiático. La planta también suministrará de materia prima a la fábrica de surfactantes (productos detergentes) de Sinar Mas Cepsa en Alemania, que provee a los mercados de Europa.
Se prevé que el mercado mundial de alcoholes grasos llegue a 4,1 millones de toneladas métricas para 2025, frente a las 3,1 millones de 2016, lo que evidencia una tasa de crecimiento anual del 3,5%. De ello, la mayor parte de los ingresos generados provendrán de Asia, que actualmente supone más del 40% de la demanda total.
La planta también contribuye a consolidar la posición de Cepsa en Asia tras la inauguración de su fábrica en Shanghái en 2015, que convirtió a la Compañía en el segundo mayor productor mundial de fenol, materia prima para la producción de plásticos de última generación.
La refinería de Lubuck Gaung de GAR, certificada por la Mesa Redonda sobre el aceite de palma Sostenible (RSPO, por sus siglas en inglés) y ubicada en las proximidades de la nueva planta de Dumai, le suministra aceite de palmiste sostenible y trazable. Además, esta nueva fábrica es totalmente autosuficiente, capaz de producir su propia electricidad, tratar sus aguas residuales y gestionar su propia logística y necesidades.