Empiezan a aparecer los primeros peces muertos en la bocana del rio Guadiaro, en San Roque, después de que quedase taponada de nuevo, el lunes 14 de agosto. Así lo ha confirmado la alcaldesa accidental en el ayuntamiento sanroqueño, Mónica Córdoba quien se ha desplazado hasta el lugar junto al concejal de medioambiente, Juan Serván y el teniente de alcalde de Obras y Servicios, José Antonio Rojas, cuya delegación tuvo que acometer en julio pasado la apertura urgente de la bocana, tras varios días taponada.
El taponamiento de la desembocadura del río, que dura ya una semana, crea problemas en el ecosistema, en la flora y la fauna; y ya se han detectado los primeros peces muertos y una importante acumulación de peces buscando oxígeno en la zona más cercana a la playa.
El pasado mes de julio, el ayuntamiento de San Roque se vio obligado a realizar una actuación que favoreció la apertura del río en unos 12 metros, pero la sedimentación en la bocana ha vuelto a generar un grave problema que ha llevado a Mónica Córdoba, a hacer “un llamamiento a la Administración competente, a la Demarcación de Costas del Ministerio de Medio Ambiente, para que actúe y solucione de forma urgente a este problema”. “Es importante que se actúe ya, porque lo peces empiezan a morir y esto se está convirtiendo en un problema grave”, ha señalado la regidora accidental.
El delegado de Medio Ambiente, Juan Serván, por su parte, ha lamentado “que en Costas se siga mirando hacia otro lado ante este gran problema”, a la vez que ha reclamado una solución definitiva que pueda acabar con un problema de años en la zona.
La pasada semana, tras la constatación del taponamiento del rio, el ayuntamiento de San Roque y los ecologistas de Verdemar reclamaron públicamente la realización de un estudio exhaustivo del litoral de la Bahía de Algeciras, la zona del río Guadiaro, en La Marina y el Puerto de Sotogrande, justificación dicha petición, “en una circunstancia se viene repitiendo en las últimas dos décadas y que no ocurría antes”.
El ayuntamiento de San Roque ya solicitó en 2011, poder actuar en la zona con un único objetivo: regenerar la playa de Sotogrande, lo que permitió tomar arena sobrante de la bocana del rio Guadiaro para realizar la actuación y la construcción de los dos espigones, pero la autorización no permitió efectuar otros trabajos. Tras esa actuación, se construyeron los espigones y se regeneró la playa, pero el consistorio carece del resto de competencias para seguir actuando, según aseguran sus responsables.