Las aguas de baño de las playas del Campo de Gibraltar se encuentran dentro de los niveles de calidad establecidos, según el informe que ha elaborado la Consejería de Salud, en base a los análisis realizados por la Secretaría General de Salud Pública y Consumo, durante la segunda quincena de julio, sobre el estado del litoral en el inicio de la temporada de baño veraniega.
La Consejería de Salud ha vigilado los 25 puntos de muestreo en las zonas de baño marítimas y zonas de baño continentales. Las muestras de agua han sido analizadas para determinar los diferentes parámetros exigidos por la normativa vigente, como los microbiológicos, transparencia, color, aceites minerales, presencia de espumas persistentes y sólidos flotantes, restos orgánicos y cualquier otro residuo –de cristal, plástico, caucho, madera, que pueda afectar a la salubridad de las aguas y se considere de interés sanitario.
El municipios, donde más muestras se han tomado es San Roque, con 7, seguido de Tarifa con 6 y La Línea con 5, (4 en la zona de Levante y 1 en la de Poniente). En todos esos puntos, la calidad del agua es excelente, al igual que ocurre en Algeciras, donde se tomaron dos muestras en El Rinconcillo y otras dos en puntos de la playa de Getares. Sólo en Los Barrios, la calidad del agua bajó de excelente a buena, en dos puntos de muestreo de los tres tomados. Se trata de los de las zonas del espigón de Acerinox y el Chiringuito Charo.
La labor periódica de vigilancia de la calidad de las aguas de baño permite elaborar quincenalmente informes sobre el estado sanitario de las aguas de baño, que están accesibles en la web de la Consejería de Salud (www.juntadeandalucia.es/salud), hasta que finalice la temporada de baño, el 30 de septiembre.
Salud recuerda que los ayuntamientos son los encargados de mantener las condiciones de limpieza y salubridad de las zonas de baño, de colocar carteles informativos con las características, infraestructuras y medidas de seguridad, de vigilar los posibles puntos de vertido cercano para evitar riesgos y adoptar las medidas de gestión que le requieran las administraciones sanitarias y ambiental.