Tenerife vierte cada día al mar 57 millones de litros de agua que incumplen la legislación sobre tratamientos de aguas residuales y sólo 2,3 millones que sí la cumplen, de forma que el 96% de las aguas residuales urbanas o industriales se están tirando al mar en la isla sin que sean tratadas como establece la normativa vigente.
Estos datos han sido dados a conocer en una rueda de prensa que contó con Fernando Sabaté, portavoz de Podemos en el Cabildo de Tenerife; Francisco Déniz, diputado de Podemos en el Parlamento de Canarias; Francis Hernández, concejal de IU en el Ayuntamiento de Arafo; Lourdes Galindo, concejal de Sí se Puede en Güímar, y Agustín Espinosa, concejal de Sí se Puede en Candelaria.
Estas organizaciones han abierto la puerta a que se investiguen los vertidos de aguas residuales sin depurar en las islas y han anunciado que impulsarán comisiones de investigación en Arafo, Candelaria y Güímar y que confían en que se extiendan «por efecto dominó» a otros municipios, a cabildos y al Parlamento, según dijo Francis Hernández.
El problema del estado de la mar como resultado de los vertidos de aguas residuales sin depurar, afirmó Fernando Sabaté, «se ha hecho evidente ante la sociedad y es un problema que viene de atrás como resultado de una ausencia completa de gestión de las aguas residuales urbanas y, en algunos casos, industriales».
Sabaté añadió que la directiva europea sobre tratamientos de aguas residuales se traspuso al ordenamiento español en 1996 y «se está incumpliendo» desde 2001, por lo que, como mínimo, «llevamos 16 años vertiendo aguas sin depurar al mar de manera ilegal, al continuar lo que se estaba haciendo desde antes».
El consejero insular de Podemos destacó que hay gente que lleva denunciando esto «mucho tiempo» y subrayó la labor de IUC en Arafo y Sí se Puede en Candelaria y Güímar. La labor desarrollada por estos grupos «ha sido clave», señaló Francis Hernández, que expresó su preocupación por los puestos de trabajo del Polígono Industrial de Güímar, por la salud de las personas usuarias de la zona y por la restauración del medio.
Hernández opinó que han sido «valientes» al llevar la denuncia de los vertidos en el Polígono ante la Fiscalía de Medio Ambiente, y se mostró convencido de que esta «valentía» se va a extender por otros municipios, como Arona o los de la Isla Baja.
TODA LA ISLA, CONTAMINADA. El concejal de Sí se Puede en el Ayuntamiento de Candelaria, Agustín Espinosa, enfatizó que, en pleno verano, los vecinos de los tres municipios del Valle «se están preguntando con preocupación si pueden bañarse en el mar y toda la isla de Tenerife está contaminada con aguas residuales sin depurar».
Finalmente, Francisco Déniz señaló que no se puede decir, como están haciendo algunos empresarios y políticos, que se puede llegar hasta 20 millones de turistas cuando la isla «no tiene capacidad para depurar aguas con los turistas que tenemos ahora». «Es una irresponsabilidad», remarcó.