El delegado territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Ángel Acuña, ha participado este jueves en el Centro de Gestión del Medio Marino Andaluz (CEGMA) del Estrecho, en Algeciras, en uno de los dos talleres formativos organizados en la provincia de Cádiz para la atención de varamientos de cetáceos y tortugas marinas en las costas andaluzas. Estas jornadas, que han tenido lugar a lo largo de este mes en distintos puntos del litoral andaluz, han sumado dos citas en la provincia: una celebrada el miércoles en el Centro de Visitantes del Parque Natural Bahía de Cádiz de San Fernando, dirigida a los municipios de Sanlúcar, Chipiona, Rota, El Puerto de Santa María, Puerto Real, San Fernando, Cádiz, Chiclana, Conil, Vejer; y la de este jueves destinada a los ayuntamientos de Barbate, Tarifa, Algeciras, Los Barrios, San Roque, La Línea
Con esta iniciativa, enmarcada dentro del Programa Operativo para España del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca de la Unión Europea 2014-2020, se pretende formar a los técnicos y autoridades de los municipios costeros de cómo tienen que actuar ante este tipo de incidentes.
Acuña ha destacado que la coordinación de los distintos actores implicados es clave para ayudar a recabar información de las causas de la muerte de estos animales, para mejorar la gestión de posibles impactos.
Para atender los varamientos, el equipo de emergencias de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio se encuentra activo los 365 días del año. Los avisos se canalizan a través del 112 que se pone en contacto con el teléfono de emergencias del medio marino, que a su vez comunica la incidencia al equipo técnico provincial que se encarga de organizar el trabajo en función del tipo de actuación.
Igualmente hay que resaltar la participación de los agentes de Medio Ambiente y del personal de entidades colaboradoras para recabar información y en la posible recuperación de los animales varados. No en vano, los técnicos de los Centros de Gestión Sostenible del Medio Marino Andaluz (CEGMA) de la Junta recomiendan no manipular ni cetáceos ni tortugas marinas (vivos o muertos) ya que se trata de especies salvajes que pueden presentar algún tipo de enfermedad o patología, por lo que deben ser tratadas por personal especializado.