Los estibadores de FNV-Havens de Rotterdam han vuelto a parar al Madrid Maersk, después de que estibadores de Bélgica y Reino Unido dieran portazo, días atrás, al segundo portacontenedores más grande del mundo.
Fue en Algeciras donde el Madrid Maersk fue desviado por primera vez al llegar a Europa. La crisis de la estiba en los puertos españoles provocó el desvío del barco a Tánger Med. Tras cruzar el Canal de Suez el 31 de mayo, la embarcación se dirigía a Algeciras, pero el anuncio del inicio de los paros intermitentes en este puerto provocó su desvío al puerto marroquí. Desde ahí y tras fondear durante varias horas en la Bahía de Algeciras, el Madrid Maersk se dirigió al puerto de Amberes, en Bélgica, donde los estibadores comunicaron su negativa a operar a bordo, en apoyo a los trabajadores portuarios españoles.
Poco a poco, las muestras de solidaridad se sucedieron con los estibadores de nuestro país y, así, en varios puertos de Europa se han negado a la descarga del buque, a pesar de que – en el caso de Algeciras – supuso importantes pérdidas para la zona.
Tras ser “rechazado” por los estibadores de Bélgica, el “Madrid Maersk” puso rumbo al puerto de Felixtowe en Reino Unido, adonde no llegó, teniéndose que desviar a Rotterdam, en Holanda, por el anuncio de los estibadores británicos a negarse a operarlo. Ahora, los trabajadores de la terminal FNV-Havens del puerto holandés han sido los últimos en parar al buque, realizando una nueva muestra de la unión sindical que poseen los trabajadores del sector.
El desvío de este barco está siendo abanderado por los estibadores europeos a la hora de hacer ver la solidaridad del sector con los estibadores españoles que mantienen los paros, a la espera de la respuesta que, este viernes, pueda dar la patronal, Anesco, a la última propuesta de acuerdo.