Coincidiendo con el Día de los Océanos, Greenpeace ha presentado en rueda de prensa en su buque insignia, Rainbow Warrior, su informe `Un Mediterráneo lleno de plástico´. Estudio sobre la contaminación por plásticos, impactos y soluciones, elaborado por la unidad científica de Greenpeace. En él ha constatado el grave problema de contaminación plástica que sufre este mar, cuya densidad de plásticos es igual a la que se encuentra en las denominadas “sopas de plásticos” del Pacífico, con una media de una pieza de plástico cada cuatro metros cuadrados.
“No hace falta irse lejos para ver la dimensión del problema de los plásticos en los océanos. Solo tenemos que asomarnos al Mediterráneo para ver cómo su fauna marina se asfixia, ingiere o enreda con plásticos”, ha señalado Elvira Jiménez, responsable de la campaña de Océanos de Greenpeace en la rueda de prensa a bordo del Rainbow Warrior.
Los datos más relevantes del informe presentado por Greenpeace son:
· Se estima que entre 4,8 y 12,7 millones de toneladas de plástico llegan a los océanos cada año.
· El Mediterráneo tiene una densidad de plásticos comparable a la de las zonas de acumulación (conocidas como “sopas de plástico”) del Pacífico: una pieza por cada 4m2
· Del 21% al 54% de todos los fragmentos de microplásticos en el mundo se encuentran en la cuenca mediterránea.
· El 96% de las muestras de basura marina en la superficie del Mediterráneo son plásticos.
· Se ha encontrado plástico en todas las zonas marinas del Mediterráneo: playas, costas rocosas, en la columna de agua y en el fondo marino, hasta profundidades de 3.000 metros.
· El 72% de la basura recogida en las playas españolas del Mediterráneo es plástico.
· Más de 1.300 especies, como cetáceos, peces, aves o tiburones, se han visto impactadas por la basura marina. El 92% de los casos con plásticos.
· El 97,3% de la basura ingerida por la tortuga boba en el Mediterráneo es plástico.
· En España, más del 50% del plástico termina en vertederos sin ser reciclado, sin contar el que no se deposita en ningún contenedor y queda abandonado.
“Los residuos plásticos son uno de los contaminantes que más rápidamente se han acumulado en la superficie de nuestros mares, en poco más de 100 años desde que aparecieron, prácticamente son los únicos residuos marinos que nos encontramos en la superficie del Mediterráneo”, Luis F. Ruiz- Orejón, investigador del CSIC-CEAB (Consejo Superior Investigaciones Científicas – Centro de Estudios Avanzados de Blanes).
“El problema no es solo estético, sino que desde toda la comunidad científica se están obteniendo evidencias de los efectos que provocan sobre una gran parte de los organismos marinos en todas las escalas tróficas, además de los cada vez más relevantes efectos socio-económicos”, concluye.
Además de científicos independientes, la rueda de prensa ha contado con el testimonio de un pescador artesanal sobre cómo se enfrentan cada día a esta problemática. “Cuando hay mal tiempo o mucha corriente las redes se llenan de plásticos. Vemos las consecuencias: cómo los animales se creen que es alimento y lo comen. Hemos encontrado pescados con plástico dentro”, explica Jesús Crespo, pescador artesanal de la Cofradía de Dènia. “Es un problema muy grave. Por eso hemos presentado un proyecto para encargarnos nosotros de la recogida de plásticos. Es limpiar nuestro ‘huerto’”, concluye refiriéndose al proyecto pionero de limpieza que su cofradía quiere poner en marcha.
MEDIDAS URGENTES. Greenpeace considera que los gobiernos de la Unión Europea tienen en estos meses una oportunidad de oro para cambiar las reglas del juego. Bajo el plan de Acción de Economía Circular, la UE está revisando las directivas relativas a residuos, incluyendo los plásticos. La Ministra de Medio Ambiente de España debe, en los debates del Consejo Europeo de Ministros, apoyar y apostar por una nueva legislación que permita adoptar medidas contundentes para reducir la producción de plásticos de un solo uso.
«El problema de los plásticos es tan grande y extenso que no basta solo con reciclar. Hay que cerrar el grifo del plástico y optar fuertemente por la reducción y reutilización», añade Elvira. “La responsabilidad no pasa solo por los consumidores. Las empresas que producen estos productos y los políticos que legislan a estas empresas deben actuar y apostar por la innovación y las alternativas”, concluye.