El puerto de Vigo acogerá el próximo mes de mayo un simulacro de emergencia marítima, que tendrá lugar en la Terminal de Transbordadores de Bouzas. En este simulacro, que pondrá a prueba el Plan de Protección del Puerto, participarán diversas administraciones, tales como la Armada española, Capitanía Marítima, Salvamento Marítimo, la Subdelegación del Gobierno, el Ayuntamiento de Vigo, la Xunta de Galicia y la propia Autoridad Portuaria de Vigo.
Como anticipo de lo que será el ejercicio que se llevará a cabo en Vigo, este jueves ha tenido lugar la reunión preparatoria del denominado ejercicio MARSEC-17, cuyo objetivo no es otro que el de planificar y coordinar a todas las Administraciones participantes en este simulacro.
La Fuerza de Acción Marítima de la Armada Española (ALMART), promueve anualmente unos ejercicios de seguridad cuya finalidad no es otra que la de fomentar la participación coordinada ante un suceso de seguridad marítima de todas las administraciones con competencias en el mar. Anualmente, se proponen escenarios por toda la costa española, siendo el establecido para Vigo la activación del Plan de Protección del Puerto.
Se pretende así mejorar la coordinación de los distintos organismos gubernamentales y no gubernamentales en el planeamiento y conducción de operaciones de seguridad marítima, en espacios marítimos de interés nacional.
En el caso particular de Vigo, el ejercicio se centrará en practicar el protocolo de activación del Plan de Protección del Puerto, la comprobación de los procedimientos de actuación y las comunicaciones y coordinación entre organismos participantes. Asimismo, se establecerán/comprobarán los medios de evacuación de la zona del Puerto y posibles buques afectados ante la emergencia.
El ejercicio MARSEC-17 forma parte de la estrategia de seguridad marítima nacional, cuyo objetivo es el de impulsar una política de seguridad en el espacio marítimo con la finalidad de mantener la libertad de navegación y proteger el tráfico marítimo y las infraestructuras marítimas críticas.
Entre las líneas de acción estratégicas, destacan la potenciación de la actuación coordinada en la resolución de los problemas que afectan a la seguridad marítima y la optimización y uso eficaz de los recursos disponibles.