La Plataforma de Inversores en Puertos Españoles (PIPE), considera que “la subrogación de los trabajadores de la estiba en las empresas concesionarias es una medida que puede traer graves perjuicios para las empresas concesionarias y para la competitividad de la economía española”.
PIPE pide al Gobierno que el nuevo marco legal para la reforma de la estiba se formule con una visión a largo plazo para evitar conflictos posteriores y convertir los puertos españoles en verdaderos catalizadores del crecimiento económico nacional. En este sentido, la Plataforma cree conveniente que sea el Ejecutivo quien lidere la adopción de dicho marco.
La Plataforma estima que el hecho de que las compañías se vieran obligadas a asumir los pasivos laborales supondría un quebranto patrimonial inasumible para muchas de ellas y que éstas se verían en desventaja competitiva frente a potenciales nuevos inversores en el sector, ya que estos últimos entrarían en un mercado liberalizado sin haber asumido los costes de la liberalización.
Asimismo, PIPE pide responsabilidad a todas las partes para evitar el grave quebranto que ya se está causando al conjunto de la economía española.
PIPE debería plantearse invertir en otros sectores porque, en España, en Europa y en otros sitios del mundo no se pude anteponer el beneficio neto de unos accionistas en detrimento del desarrollo de todo un sector pionero y exportador como lo es la economía de la Comunidad Valencia, por ejemplo, o la andaluza, o la catalana, gallega, la cántabra, vasca y demás.