El evento ha reunido a 537 participantes de más de 50 países, 255 de ellos en la categoría Masters, que incluye 72 Grandes Maestros (GM). Muchos repiten año tras año. La posibilidad de medirse con los mejores del mundo y los premios son dos grandes alicientes, pero hay más. Los participantes deben concentrarse para rendir al máximo y un hotel con vistas al Estrecho es, sin duda, el lugar ideal. La diversión también ayuda a despejar la mente y Stuart Conquest, el director del evento, lo sabe.
Conquest ha sido el encargado de cumplir el sueño del creador del festival y dueño del hotel Caleta, Brian Callaghan: hacer de Gibraltar un referente del ajedrez mundial. La función de Conquest, sin embargo, no termina en los salones donde se desarrollan las partidas, sino que además ejerce de perfecto anfitrión y maestro de ceremonias. Es el genio de las camisas llamativas y los fulares, tan capaz de atraer a top mundiales como de hacer del ajedrez un espectáculo al alcance de todos los públicos.
En lo meramente deportivo, destacar los grandes duelos, como la final entre el estadounidense Hikaru Nakamura y el español David Antón, la gran sorpresa del evento a sus 21 años, congregan a numerosos profesionales y aficionados. El Ministro Principal de Gibraltar, Fabián Picardo; el Viceministro Principal, Joseph García; y la Ministra de Igualdad, Samantha Sacramento, también visitan el hotel durante el Open. Las buenas vibraciones del torneo atraen a gibraltareños y visitantes al Caleta, cuyas puertas permanecen abiertas al público.
La clave del éxito del festival, reconocido como el mejor Open del Mundo por la Asociación de Profesionales del Ajedrez, radica, como dice Conquest, en un año entero de preparación. “Invitamos a gente maja”, comenta, “lista para competir, pero también dispuesta a participar en actividades paralelas, en las que pueden participar junto a otros de menos nivel”.
La victoria de Nakamura y la cena de despedida pusieron fin a once jornadas intensivas. El Ajedrez, con mayúsculas, se despide del Peñón hasta que el Castillo del Moro vuelva a iluminarse en 2018 con el peón gigante de color azul, emblema del Open Internacional Tradewise de Gibraltar.