La Escuela Politécnica Superior de Algeciras ha acogido la puesta en marcha, por parte de representantes de las empresas DRACE y GEOCISA y de la Universidad de Cádiz, del proyecto de investigación que se firmó el pasado 7 de noviembre para la reutilización de residuos procedentes de las diferentes industrias del Campo de Gibraltar.
Este proyecto se corresponde con los estudios que lleva desarrollando el grupo de investigación TEP-951 (ARHENE) para el aprovechamiento de residuos industriales, de construcción y demolición para la fabricación de hormigón estructural y no estructural.
El empleo de materiales de deshechos generados por las industrias que posteriormente van a vertedero, pueden tener una segunda aplicación en la construcción, en el desarrollo de un nuevo material que esté de acuerdo con el medioambiente y sin ningún tipo de perjuicio para el ser humano, una vez se ha puesto en servicio. Se pretende generar un nuevo hormigón, dotado “de unas características especiales fundamentalmente en ambientes agresivos, como puede ser el marítimo terrestre, con una capacidad resistente igual o incluso mayor durante la vida útil para la cual se ha diseñado, mediante tipos diferentes de prefabricados”, han explicado sus promotores.
Este convenio, han señalado, es de “gran importancia” tanto para la Universidad como para las empresas inmersas en el proyecto, permitiendo que la investigación llevada a cabo tenga un uso para la sociedad, generando riqueza y minimizando el riesgo que producen algunos materiales al encapsularlos y neutralizarlos evitando depositarlo en lugares que posteriormente quedan almacenados sin ningún uso. El beneficio que genera “no sólo es poner en valor residuos, sino también el ahorro tanto energético, hídrico así como medioambiental que se lleva a cabo dentro del mundo industrial”.