El borrador del mapa de peligrosidad frente a tsunamis elaborado por la Dirección General de Protección Civil recoge que, además de Canarias, Huelva y Cádiz se enmarcan en la zona de mayor riesgo de sufrir maremotos.
Este plan ha sido presentado en los primeros días de noviembre a los representantes de las comunidades autónomas con costas para que éstos puedan proponer modificaciones.
Las tres localidades podrían registrar olas de hasta ocho metros de altura que llegarían en un mínimo de 55 minutos (en el caso de Huelva) y en un máximo de 1:10 horas (Canarias) y que estarían provocadas por las fallas Marqués de Pombal y Horseshoe.
La Dirección General de Protección Civil también prevé que se podrían producir olas de altura relevante en el Mediterráneo y sin relevancia en la cornisa cantábrica. En Galicia, por ejemplo, estas serían de 50 centímetros y llegarían en una hora y 15 minutos.
En la costa mediterránea de Andalucía se producirían olas de tres metros, que en Ceuta no alcanzarían el metro de altura y en Melilla rebasarían los cuatro debido a la falla Alborán Ridge South. A esta última localidad, llegarían con un margen de 15 minutos, el más bajo de toda España. En la ciudad ceutí el margen es de 25 minutos.
Aunque en España la probabilidad de que ocurra un tsunami es muy baja, los historiadores aún recuerdan los destrozos que dejó el terremoto de Lisboa en 1755. De ahí que se haya puesto en marcha recientemente la Red de Alerta de Tsunamis, que prevé en el futuro intercambios de datos con Portugal y escenarios y simulaciones en tiempo real