El nuevo Ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, tiene por delante una patata caliente que debe enfriar de inmediato. Se trata de la reforma del sector de la estiba que impone la Comisión Europea, como consecuencia de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que condenó el sistema de estiba de este país, hace ya casi dos años.
La interinidad del Gobierno ha concluido y por ello, se espera que en el primer trimestre de 2017 se pueda dar una “esperada” respuesta a Bruselas, ya que de lo contrario, la amenaza de multas millonarias a nuestro país se puede hacer realidad después de varios amagos, al cumplirse los últimos plazos establecidos por el tribunal de Estrasburgo.