La Barca del Pescador. Así se llama el buque de transporte fluvial más grande del mundo, construido por el astillero paraguayo y que ya está a punto para surcar la hidrovía Paraguay-Paraná, según ha informado en las últimas horas el presidente de la empresa, Guillermo Ehrecke.
La hidrovía Paraguay-Paraná es la mayor arteria de comunicación y de transporte fluvial para Argentina, Brasil, Uruguay, Bolivia y Paraguay, y permite a estas dos últimas naciones, sin salida al mar, acceder al océano Atlántico para exportar sus productos.
Construir la embarcación, de 120 metros de eslora y concebida para 15 tripulantes, ha requerido una inversión de 12 millones de dólares, siendo ya botada en aguas cercanas al puerto de Villeta, a unos 40 kilómetros de Asunción. Tiene capacidad para 720 contenedores y está a la espera de su bautismo para comenzar a cubrir la ruta entre Asunción, Buenos Aires y Montevideo.
Ehrecke dijo que se trata de un encargo de la empresa holandesa Concordia, presente en la hidrovía suramericana y también en ríos de Asia y Europa. «No hay un buque más grande en navegación interior, ni siquiera en China», según el presidente de «La Barca del Pescador».
El empresario naviero paraguayo añadió que los contenedores que cargue el nuevo buque podrán trasladar todo tipo de productos, desde grano hasta equipos electrónicos, y que sus dimensiones economizarán el consumo de combustible.