El empresario y Consejero Delegado de Grupo Piedra , Manuel Piedra, ha sido reelegido presidente de la Asociación de Empresas de Servicios de la Bahía de Algeciras (AESBA) en el transcurso de la asamblea general ordinaria en la que se conmemoró el 25 aniversario del colectivo.
Piedra ha renovado a gran parte de su junta directiva, integrada por 15 vocales, además de los vicepresidentes primero y segundo, cargos que ostentan respectivamente José Manuel Tejedor e Iván Ausina, quien sustituye a Antonio Adamberry, recientemente fallecido.
El buque ‘Poeta López Anglada’, de la naviera Balearia, fue el escenario de la reunión celebrada durante la travesía hacia Tánger Med, donde posteriormente los miembros de AESBA realizaron una visita a sus instalaciones.
Piedra lleva ya 11 años al frente de AESBA y afronta este nuevo mandato con la ilusión renovada y el apoyo de la totalidad de una asamblea que representa a más de un centenar de asociados y empresas del sector marítimo portuario.
La nueva directiva tiene varios frentes abiertos, entre los que destaca el problema del fondeo de los buques en aguas de la Bahía. Un asunto que cumple más de tres años de enfrentamiento con la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA), ya que el presidente de AESBA ha denunciado en numerosas ocasiones que la distribución actual repercute negativamente en las actividades de servicio al buque.
Manuel Piedra considera que el tráfico off-shore abre grandes expectativas para la Bahía de Algeciras, gracias a las instalaciones existentes en Campamento que dan cabida a las plataformas petrolíferas, lo que representa un negocio muy importante para el sector de los talleres auxiliares.
Desde AESBA también se espera con interés la futura instalación de un tercer operador de contenedores en la segunda fase de Isla Verde Exterior. Otro factor que tienen en mente es el de la reforma de la Ley de Puertos, que debe ser modificada en el ámbito de la estiba portuaria y que en lo que se refiere a esta asociación debe ir acompañada con un cambio en las tasas de reparación de buques, “actualmente muy poco competitivas”, según Piedra.